martes, 12 de mayo de 2015

EL AFAN Y LA ANSIEDAD

El afán y la ansiedad

“Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida…” Mateo 6:25a (RVR)

Como leemos en Mateo 6:25 al 34 donde Jesús nos enseña acerca del preocuparnos, debido a los efectos negativos causados por la preocupación Jesús nos dice que no nos preocupemos por necesidades que Dios promete suministrar. La preocupación conduce a dañar nuestra salud, a desestabilizar nuestra productividad, negativamente influye en la manera en que tratamos a otros y reduce nuestra capacidad de confiar en Dios. ¿Cuántos malos efectos está usted experimentando? Hay una diferencia entre la preocupación y la inquietud, preocupación inmoviliza y preocupación te mueve a la acción.

Si hacemos el Reino de Dios nuestra principal preocupación pusiéramos a Dios en primer lugar y llenaríamos nuestras vidas y nuestros pensamientos en un deseo de ser como su personaje como nuestro patrón para servirle y obedecerle en todo.

¿Qué es realmente importante para nosotros? Personas, objetos, objetivos y otros deseos que todos compiten por prioridad y ninguno de estos se topen a Dios en primer lugar si no le damos primer lugar en cada área de nuestras vidas.

A veces no podemos ver la diferencia entre planificación y preocupación, el tiempo gastado en la planificación es tiempo bien gastado, mientras si lo gastamos en la preocupación este es tiempo perdido. Una planificación cuidadosa es pensar en el futuro y confiando en la ayuda de Dios. Cuando se hace correctamente la planificación puede aliviar la preocupación. Por el contrario cuando estamos preocupados somos consumidos por el miedo y nos resulta difícil confiar en Dios permitiendo que los planes interfieran en la relación con Dios.

No dejes que tus preocupaciones sobre el futuro afecten tu relación con Dios hoy.

En los versículos 6:25-34 Jesús proporciona siete razones por que no debemos preocuparnos;

1. 6:25 Confiemos en el mismo Dios que creó nuestras vidas con los detalles de nuestras vidas

2. 6:26 Preocuparnos por el futuro obstaculiza nuestros esfuerzos hoy

3. 6:27 Preocupación es más perjudicial que útil

4. 6:28-30 Dios no ignora quienes dependen de Él

5. 6:31-32 La preocupación demuestra una falta de fe en comprensión de Dios

6. La preocupación nos impide los desafíos reales que Dios ha puesto sobre nosotros

7. El vivir un día a la vez nos impide ser consumido con preocupación.

Con toda fe entrégale tus preocupaciones a Dios porque El es fiel, siempre lo fue y siempre lo será.



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